Reconocimiento autonómico y Europeo de tres profesores amigonianos

 

Tres profesores amigonianos, reconocidos a nivel autonómico y europeo

 
Tres profesores de tres Colegios Amigó han recibido distintos reconocimientos en los últimos meses, dos a nivel autonómico y uno a nivel europeo. Hablamos con Guillermo Beltrán, de EPLA, Laura Hernán, de Caldeiro, y Tomás Pascualena, del Colegio Amigó, sobre estos galardones y sobre la vigencia de los valores de la pedagogía amigoniana.

Guillermo Beltrán fue reconocido el pasado mes de noviembre como uno de los 50 mejores docentes de la Comunidad Valenciana. Los alumnos de 1º de la Universidad Politécnica de Valencia le eligieron como uno de los mejores profesores del año en la tercera edición del premio “Magistrales”. Educador amigoniano desde 1995, para él “este premio de reconocimiento por parte del alumnado, es una ilusión muy grande y cada pedacito del mismo corresponde a cada uno de los miembros de nuestra familia amigoniana y de los diferentes estamentos educativos, que con el esfuerzo y el trabajo diario están comprometidos e implicados en la formación técnica y humana de cada uno de nuestros alumnos y alumnas”.

Guillermo subraya que en su labor pedagógica “es fundamental la implicación de padres, profesores y centro educativo. Cada alumno es único con sus circunstancias, por eso es fundamental el tratamiento personal de cada caso, en cada momento y en cada circunstancia; éste es el verdadero espíritu amigoniano”. Tras 25 años de docencia, Guillermo reconoce que “cada curso escolar es una experiencia más, en donde aprendes la forma más efectiva de impartir una materia. También de innovar, introduciendo nuevas formas y métodos de aprendizaje que han funcionado en otros cursos académicos, y todo ello de manera gradual”.

Profesor de asignaturas de tecnología industrial, telecomunicaciones, informática o robótica, explica su lema “imagina, crea y, sobre todo, disfruta y sé feliz”: “No solo impartimos temario a nuestros alumnos, también transmitimos emociones y sentimientos. Las emociones son las que guían nuestras vidas, por eso les recuerdo a mis alumnos que no solamente son importantes los conocimientos, sino también las cualidades y los valores humanos que intentamos transmitir desde las instituciones amigonianas”.

Laura Hernán, por su parte, obtuvo también en noviembre para el Colegio Fundación Caldeiro el Sello de Calidad Europeo 2020 que otorga el programa eTwinning de Erasmus+. El programa europeo reconoció con este reconocimiento el trabajo que Laura llevó a cabo con sus alumnos de Bachillerato en el proyecto “My Journal 2020: A Million Thoughts”. “El hecho de haber obtenido este sello nos indica que Caldeiro está haciendo un gran esfuerzo por irse adaptando a los nuevos programas y métodos educativos. Los alumnos deben adquirir diferentes competencias, y el saber práctico permite reforzar, mejorar y afianzar el aprendizaje de las lenguas extranjeras. Estamos muy satisfechos con este resultado y damos gracias a nuestros alumnos por su trabajo y a la comunidad educativa por todo el apoyo recibido”, expone.

Profesora de idiomas en ESO y Bachillerato desde 2014, indica que, ante la posible desmotivación del alumnado debido al confinamiento domiciliado del pasado mes de marzo, “creí oportuno realizar un proyecto eTwinning que les permitiera conocer otras culturas, expresar su situación emocional en ese momento, nunca antes vivido, a la vez que aprendían a usar nuevas aplicaciones y plataformas informáticas, y todo ello, en inglés. Este es un programa clave para la innovación en los centros y para el aprendizaje tanto del profesor como del alumno, y ha sido una gran experiencia para Caldeiro, dando un nuevo impulso al aprendizaje de las lenguas extranjeras en nuestro centro”.

Sobre cómo se traslada la tradición pedagógica amigoniana a un proyecto europeo como este, Laura destaca que “el educador amigoniano se debe a una misión educativa concreta basada en un ambiente familiar y abierto presidido por valores tales como la responsabilidad, la autonomía y la simple alegría de convivir, por lo que es muy fácil proyectar estos valores en proyectos europeos”. “Está en la propia esencia del educador amigoniano el darse a los demás y conocer lo que nos rodea y proyectos de colaboración como eTwinning permiten una aproximación a otras culturas, a otras personalidades, si cabe, y a través de esta aproximación llegamos a conocernos mejor a nosotros mismos y a lo que nos rodea”, recalca.

Por último, Tomás Pascualena, profesor de Lengua y Literatura en Secundaria y Bachillerato en el Colegio P. Luis Amigó, acaba de ser galardonado con la Medalla de Plata al Mérito Deportivo 2020, que reconoce su colaboración en la promoción del deporte en Navarra. “Después de tantos años, es una satisfacción personal muy grande ver tu trabajo desinteresado recompensado con este premio. Lo más bonito ha sido recibir llamadas y mensajes de personas con las que has compartido alguno de esos momentos durante estos años y que, ahora mismo, por circunstancias de la vida, no están tan presentes en tu vida. También fue muy entrañable el pequeño homenaje que me hicieron los compañeros más cercanos del cole, que fueron los primeros en enterarse”, explica.

Tomás lleva ligado al mundo del fútbol desde hace 35 años y para él, “el voluntariado, el darte a los demás que propugnan los amigonianos siempre ha estado en mi forma de ser”. “En el fútbol siempre he encontrado valores más allá del competitivo. La solidaridad, el compañerismo, el respeto, la constancia, el compromiso, la pertenencia a un club… son aspectos que perfectamente encajan en la labor formativa de los chicos y chicas y que pueden complementar perfectamente lo que van adquiriendo día a día en las aulas de nuestro colegio”, añade.

Profesor de Lengua y Literatura en Secundaria y Bachillerato en el Colegio Amigó, al que llegó en 2018, cree que educación, deporte y formación están muy relacionados. “Siempre me ha gustado la parte formativa del deporte, en mi caso, del fútbol, por las circunstancias que rodean a los chavales más allá de la práctica del deporte (cómo van en los estudios, qué tal con los amigos, cómo se encuentran con la familia...) y eso lo he trasladado también a mi actividad docente”, concluye.